Institut Guttmann y Hospital Nacional de Parapléjicos señalan que las caídas fortuitas y los accidentes de motos encabezan los datos de las lesiones medulares
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la lesión medular como los daños sufridos en la médula espinal a consecuencia de un traumatismo (por ejemplo, un accidente de coche) o de una enfermedad o degeneración (por ejemplo, el cáncer). Aunque no se tienen estimaciones fiables sobre su prevalencia mundial, se calcula que la incidencia mundial anual oscila entre 40 y 80 casos por millón de habitantes.
Ahora, el Institut Guttmann y el Hospital Nacional de Parapléjicos han realizado una estadística relacionada con las lesiones medulares. El total de personas que se suman a la lista con lesión medular asciende a 915, con 657 pacientes contabilizados por el Institut Guttmann, por los los 258 del Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo.
Según recoge ASPAYM en una nota de prensa, las caídas fortuitas y accidentes de moto encabezan los datos en nuevas lesiones medulares traumáticas en 2021. Así lo recoge los registros de los dos centros médicos de referencia del país, el Institut Guttmann y el Hospital Nacional de Parapléjicos. Con todo, las lesiones no traumáticas son mayoría con respecto a las traumáticas.
División de lo nuevos lesionados medulares por centro
En primer lugar, el Institut Guttmann estima 657 pacientes nuevos en 2021. Del total, apenas ha podido categorizar poco más de un tercio, 255. Las caídas fortuitas suman 14 casos; de las cuales 10 más son en el ámbito laboral. Hasta 31 lesiones han provocado los accidentes de tráfico, con las motos en primer lugar (17). Tras ellas, van los coches (8) y accidentes de tráfico in itinere (3) y en otros desplazamientos (3).
En lo que se refiere al recinto hospitalario ubicado en Toledo, se cifra en 258 pacientes nuevos los ingresos con lesión medular aguda recibidos en 2021. Como ya ocurrió en 2020, las caídas fortuitas, con 59 casos (casi un 23%), es la causa principal. Por otra parte, 39 lesiones se debieron a accidentes de tráfico. De entre estas últimas, una veintena vio implicada una moto en el siniestro, frente a las 16 que tuvieron lugar desde un vehículo, 2 desde una bici y 1 por causa de un atropello.
«Esto demuestra que la seguridad vial sigue teniendo una relevancia manifiesta», valora Mayte Gallego, presidenta de ASPAYM. «Las campañas hacen mucho por sensibilizar, pero tenemos que seguir transmitiendo que las personas más vulnerables; ya sea conduciendo una moto, una bicicleta o los nuevos vehículos de movilidad personal, son quienes sufren las peores consecuencias de un accidente de tráfico».
