Almudena Nevado 18.12.25

Vivir el hoy, al máximo, sin dejar nada por dar ni disfrutar, afrontar cada día con ganas y con fuerzas, puede sonar a tópico, pero piensa que la vida puede cambiar en un minuto, en un día, en un mes, en un año. Y cuando cambia, nada es igual. De repente afrontas la vida de otra manera, con más dificultades, con más dolor, con juicios y prejuicios sobre ti.

Esto es lo que le pasó a Almudena Nevado, que después de 6 meses de dar a luz a su segundo hijo, comenzó a perder sensibilidad en las piernas. El resultado, una silla de ruedas que le acompaña hasta el día de hoy. Una consecuencia, la ruptura de su matrimonio. Un beneficio, el amor incondicional de sus hijos.

La aceptación y adaptación de esta situación fue dura y le sigue requiriendo altas dosis de fuerzas para luchar por una accesibilidad universal en su localidad, Almodóvar del Campo. Pero Almudena no se rinde ni se va a rendir hasta conseguir la igualdad de derechos y oportunidades.

Su mensaje es claro: ‘Vive el hoy y pon corazón a las cosas’. Llegarás más lejos.