Se trata de la proposición de ley para derogar esa parte de la nueva Ley de Aguas y que ahora deben tramitar las Cortes regionales
El Consejo de Gobierno de Castilla-La Mancha ha dado luz verde a la proposición de ley del Grupo Socialista mediante la cual se suspenderá el denominado Canon Medioambiental Europeo, un nuevo impuesto al agua, que recientemente se aprobó en la nueva Ley de Aguas de la comunidad autónoma. De esta forma, la propuesta, ya anunciada por Emiliano García-Page, se remitirá a las Cortes regionales para su tramitación.
La portavoz del Ejecutivo, Blanca Fernández, ha reiterado que esta suspensión es la decisión “más inteligente” porque evitará sanciones de la Unión Europea habida cuenta de que la Directiva Marco del Agua (DMA) obliga a aplicar este tributo. De hecho ha recordado que Castilla-La Mancha y Castilla y León son las dos únicas autonomías que no lo cobran mientras que sí lo hacen otras como Galicia, gobernada por Alberto Núñez Feijóo, actual presidente nacional del PP.
“No es el momento de implementar nuevos impuestos. Es coherente la suspensión de un impuesto que no se ha aplicado nunca en Castilla-La Mancha, y permanecemos en esa isla junto con Castilla y León. Lo seguiremos siendo porque somos sensibles a la situación que se está viviendo como consecuencia de la guerra de Ucrania y de la subida de precios”, ha subrayado la portavoz.
Por último, ya remarcado que el impuesto es una obligatoriedad que impone la DMA al establecer que la gestión responsable del ciclo integral del agua tiene que ser financiada a través de las tasas y cuotas de la ciudadanía que consume ese recurso, pero que Castilla-La Mancha finalmente no va a aplicar debido al alza de precios.
